martes, noviembre 07, 2006

Manteniendo el desequilibrio

Van pasando los años y sin darnos cuenta vamos forjando nuestra vida sobre bases frágiles. Ideas de las que no depende nuestro futuro, o quizá si. Ideas de las que nosotros solos nos convencemos aunque todo nuestro entorno insista en destruirlas, nos cansamos de pensar “que sabrán ellos?!”, nos cansamos... Yo además... las alimento cuidadosamente a media noche.

Y de repente un buen día los pequeños pilares en los que reposa tu entereza se tambalean, porque has pasado de depender de ellos a ser ellos. De manera que prácticamente la vida te exige reconstruirlo todo, vamos que el Escorial una mierda al lado que de la que yo tengo montada.

Mis pilares son pequeños y de esquinas redondeadas, total que si te apoyas mucho pueden volcarse llevándose por medio el resto del Tente. Cruzo un río que no acaba nunca y me apoyo en cantos escurridizos, con la posibilidad de dar un paso en falso y esnucarme en cualquier momento, así veo mi vida. Y luego que si soy pesimista, que si tal que si cual... anda ya!



Total que podría pasarme el resto de la mañana escribiendo majaderias que en definitiva no digan nada de lo que me gustaría decir, porque las cosas que me gustaría decir son o muy personales, o muy indiscretas, o muy “jevis”. Y para hablar sin decir nada mejor callarse.

6 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Es verdad que la vida exige numerosas veces que uno reconstruya los pilares según va avanzando.

No voy a entrar en la chorrada de que los chinos tienen el mismo anagrama para crisis que para oportunidad, porque incluso con tus ojitos alargados me dirás “¿qué coño me importan a mi los chinos?”, pero es verdad que muchas veces esa reconstrucción de pilares es la que te permite edificar un edificio mucho mejor.

Así que corrige los fallos de diseño y construye de nuevo con más ilusión todavía.

¡¡Suerte y animo!!!

McGuiver.

4:31 p. m.  
Blogger alie said...

Ay, chiquita... no te parece que siempre tenemos que estar adaptándonos? Las cosas pasan por razones, que aunque sean imposibles de descifrar en un primer momento, nos ayudan a evolucinar.

Hace poco descubrí que es bueno éso de reconstruirse de vez en cuando. Hay que reinventarse. Y además, aunque sea desde la base de los pilares, el resultado final seguro que es un yo mejorado y estupendo. Y si no, pues ya lo volveremos a inventar hasta que nos sintamos cómodos con el resultado.

Y no te sientas mal porque te llamen pesimista. Las personas tienen diferentes estados de ánimo y es imposible estar siempre con una sonrisa en la cara y pensando en positivo. Quien no comprenda ésto, no merece tu preocupación.

Un besote wapa. Y ánimo.

11:37 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Es tan sumamente abstracto de lo que hablas que… no sé de qué hablas exactamente. Cada cual entiende su vida a su manera, pero después de muchos años “entendiendo” la mía hace un tiempo que llegué a la conclusión de que no hay mucho que “entender,” a pesar de que me empeño en ello como el que más. Puede ser una necesidad humana el tratar de explicarse las cosas, peeero… un primo mío, que tiene unos 16 años, un día soltó esto: la mente no suele admitir aquello en lo que no tiene qué pensar (o que sin acento, no me acuerdo bien, pero igualmente da una idea de lo que nos pasa).
Yo solía expresar mi vida como un complejo (eso por supuestísimo) castillo que debía llenar y proteger, con muchas salas a las que podías acceder, simple mortal, o no. Quizá esos pilares tuyos tan redondeados e inestables son otro símil a derruir, como mi castillo, o mi callejón o mi tapia. Porque en mi modesta opinión la vida y el vivir no son pilares que se tambalean ni bases frágiles o sólidas, ni castillos, ni ríos traicioneros sin fin, la vida y el vivir son lo que son.
Y son tan poco y sin embargo todo lo que tenemos, y puede que, aparte de una explicación biológica, otra psicológica, otra social, que en el fondo no nos sacan de ningún apuro, y algún que otro sueño, no merezca la pena darle más vueltas. La vida cada cual define la suya viviendo, y quizá no haya mucho más que decir, y sí mucho más que vivir.

10:57 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Tia no ves que vivimos en la era de las casas prefabricadas, que esplanada que hay esplanada en la que te ponen un edificio de 1235 pisos en media semana?
Entonces ¿cómo esperas que los pilares de una vida sean firmes si no lo son ni los de nuestras casas?
Un besote

11:02 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

¿Pantallas planas o pantallas chatas?

2:10 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

pantallas chatas por supuesto

9:14 a. m.  

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