miércoles, julio 12, 2006

Veranito

He descubierto que si ya en invierno me cuesta relacionarme con la gente lo del verano roza el autismo, y la razón es muy sencilla. En invierno aún necesito cruzar un par de frases con la gente para sentir esa sensación de pesadez, de pereza, de perdida de tiempo. En verano es mucho más sencillo, me basta con olerles.

Son las 9:42 de la mañana y ya me he cruzado hoy con tres candidatos para morir por cerdos. Me produce un asco infinito la peña que huele mal. Y es que pocas cosas me dan tanto horror y tanta sensación de falta de respeto como un cerdo, ¿Qué demonios les he hecho yo para merecer esas nauseas nada más levantarme?, algunas personas ya no es que apesten, es que se vengan de ti al pasar por tu lado, huelen a rencor.


Hay una señorita muy aseñorada que cada mañana sin falta coincide conmigo en el autobús. Yo siempre me acomodo en el asiento de detrás del conductor por motivos en su mayoría relacionados con mis fobias sociales, es un asiento aislado, me da el aire en cada parada y suele ser más espacioso que el resto. El caso es que cada mañana en la tercera parada después de la mía sube una señorita de aspecto impecable, cada día un modelo diferente, siempre elegante. Bien, pues el pestazo a tabaco que desprende es digno de cortarle el pescuezo ahí mismo. Es bastante probable que ella no sepa por qué demonios cada mañana la miro con esa cara, quizá el día que directamente le meta una ostia se lo explique.

9 Comments:

Anonymous Anónimo said...

Llévate una pinza de la ropa y cuando suba te la plantas en la nariz.

Sutil y no violento. ¡Pa elegantes, las nenas!

12:51 p. m.  
Blogger k|nt said...

¡ OSTIA ! ¡ OSTIA ! ¡ OSTIA ! ¡ OSTIA !
Dale una ostia, explícaselo todo y cuéntanoslo.

Hazlo :)

10:03 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Estás poseída por el dios de la mala ostia, Jelen. Hay partirse un poco el ojete hommmmbre! Y si para ello no queda más remedio, pues lo que dice el k|nt, pero con cashondeo interió, por guarra. A pasar buen veranito.

12:14 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Estoy de acuerdo, pero mucho peor es ir por la mañana a comprar tabaco a una tasca y que al bodeguero le cante el pozo a cazalla y junto a esto encontrarte por la mañana a algún colega que ha salido de fiesta y se ha olvidado del remedio consistente en un chicle de 5 céntimos.
Y ya que nos pomenos muerte a las abuelas que se echan algún perfume en los chinos con una sutil mezcla de pachuli y vapor de la cocción de repollo, y a los arreglaos que usan tabac para ir de pesca por las noches.
¡Qué viva el nenuco y los chicles! Estos si que son grandes inventos y no cosas como el chupa chups

1:03 a. m.  
Blogger papa pan said...

Hola JELEN, yo soy partidario de la no violencia y quizás lo de la sutil pinza en la nariz que propone ERIDE sea suficiente.
Además el olfato no es el único sentido que se puede ofender. ¡Tolerancia al poder!

Besos.

11:04 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Lo de la ostia, sin duda es un comentario que no pasa de eso. Pero considero que hay cosas que no se tienen por qué tolerar, no? La tolerancia esta bien pero así tolerar a mogollón es tan absurdo ocmo no hacerlo. Vamos ...me parece a mi.

1:28 p. m.  
Blogger alie said...

Estoy a favor de que el próximo día le regales un ambientador, como los que se cuelgan del retrovisor del coche.

Si te mira raro, le pones una sonrisa y le saltas: 'dicen que neutraliza los malos olores' :D

2:42 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Yo estoy a favor de que le pegues una ostia, asi sin mediar palabra. Me cago en la tolerancia chupiguay imperante en el reino de los supersupermegas. Estoy contigo jelen la tolerancia como todo en la vida con mesura. Los olores cada uno con los suyos en su casa.

Yo además no le explicaba nada.

11:36 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

;) irá por ti!

12:04 p. m.  

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